ki1.gif La puesta en escena del Circo de Pekin en el Vértice del Museo de la Nación merece mucho más que un post en este blog. Hace mucho tiempo que no asistía a un espectáculo de tanta belleza y misticismo dentro del rubro de los circos y que además no use animales en cautiverio (para mi felicidad). La obra de arte se lleva a cabo en dos bloques de 7 y 8 actos cada uno separados por un intermedio de 15 minutos durando en total 2 horas. Como irán notando poco a poco en los posts reflejados en este blog, Sarah es muy imaginativa, así que ha ido denominando los actos según la historia que los acróbatas le contaron en el espejo:

  • Primer bloque: El dragón rojo, Bajo la luna (campanita y Peter Pan para otros 😛 ), Pandillas, La muerte de la sirena (sin palabras, simplemente hermoso!), Sombreros y esperanza (al ver esto tuve una especie de flashback con los niños que se ponen a hacer malabares entre la luz roja y la verde del semáforo en muchas de nuestras pintorescas avenidas), Mazas y sonrisas , El clon (realmente no son tan igualitos..pero da la impresión que surgen del mismo espacio).
  • Segundo bloque: Jóvenes ninja (aunque la verdad parecían monitos ninja..en el mejor sentido de admiración), Dulces sueños (en pareja), El mago (o la maga?), Acuatica (en realidad usaban platillos suspendidos, pero daba la impresión de plantas acuáticas en un estanque), Sombrillas y vanidades, El árbol, Acrofobia y la Danza del dragón rojo.

Un par de blogs aquí y acá también comentan sobre esta maravilla visual que estaba marcada para culminar su visita por nuestras tierras el 06 de agosto pero que extendió su visita 2 semanas más. Créanme, vale la pena!